En las últimas décadas, debido principalmente al fenómeno de la globalización que aleja cada vez más los centros de producción de los centros de consumo y en gran parte a los desplazamientos pendulares, se ha producido un fuerte incremento del transporte. A ello, debemos unir el progresivo aumento de las clases medias y de su nivel adquisitivo que ha supuesto un incremento del turismo y de las estancias en el extranjero.
Como principales impactos del transporte podemos destacar la contaminación del aire, acústica, e indirectamente lumínica. También debemos hacer mención a su elevado coste energético, principalmente procedente de combustibles fósiles no renovables y al empleo de gran cantidad de materias primas. Los impactos en el paisaje y la destrucción y fragmentación de hábitats y la afección a la salud de las personas son otros de los aspectos que nos obligan a invertir esta realidad.
Los planes de movilidad surgen como respuesta a esta problemática, ofreciendo soluciones para la ciudadanía, favoreciendo el uso del transporte público, movilidad compartida, e incluso reduciendo las necesidades de desplazamiento. Otro aspecto fundamental es la ordenación del territorio, debiendo orientarse hacia el desarrollo planificado y equilibrado de las actividades en el territorio, asegurando un óptimo y eficaz aprovechamiento de los recursos naturales y manteniendo y mejorando la calidad de vida de la sociedad extremeña.
Desde la Dirección General de Urbanismo y Ordenación del Territorio (DGUOT), se están llevando a cabo diversos estudios que puedan ayudarnos a proyectar ciudades más amables, ciudades inclusivas, ciudades para todas y todos. En este sentido, los estudios sobre movilidad nos permiten analizar cuáles son nuestros hábitos y en función de estos, las ciudades deberían diseñarse aportando soluciones en la creación de una sociedad más sostenible, inteligente y transformadora.
Actualmente, la DGUOT está realizando una encuesta orientada a conocer las rutinas de movilidad entre la ciudadanía, desagrega por sexos de forma consciente, se quiere conocer de qué tipo son los desplazamientos de extremeñas y extremeños.
Según estudios realizados por la universidad Carlos III, las mujeres se ocupan en un 80% de los dependientes de mayor edad. En un número elevado, las personas dependientes: menores, mayores, discapacitados y enfermos son atendidas por mujeres, que además se encargan de las tareas domésticas, lo que supone patrones de desplazamientos diferentes al de los hombres. A través de esta encuesta se quiere ver cuánto se ajustan estos estudios a la realidad extremeña, cómo son estos movimientos entre la ciudadanía y cómo se pueden diseñar soluciones para nuestras ciudades y redes de transporte, en función de los resultados.
Gracias a la participación ciudadana, las políticas orientadas en este sentido se centran en reducir en lo posible el uso de agentes contaminantes, motivando a su vez un dinamismo más comprometido con nuestro entorno físico, y proyectando alternativas más eficientes y saludables que mejoren nuestra calidad de vida.
La encuesta se encuentra disponible en el siguiente link hasta finales del mes de junio: