Sólo en el sector agrario se ha pasado de 108 empresas de agricultura ecológica en el año 2015 a más de 200 en el 2019.
Hoy se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente. La existencia de sol, agua y tierra, de una estrategia regional sobre economía verde y circular alineada con la europea y, sobre todo, de unos sectores económicos y sociales volcados y comprometidos con la producción sostenible de nuestras industrias, son la base sobre la que se fundamenta que la Comunidad Autónoma de Extremadura esté experimentando un importante aumento de la generación de riqueza y empleo relacionado con los sectores económicos verdes y circulares. Así se deduce del análisis de muchas de las empresas que operan en la región y de sus procesos productivos. Empresas de nueva creación y otras que están transitando desde producciones lineales a otras más circulares. Entre las primeras industrias de la región en cuanto a facturación y número de trabajadores nos encontramos con un buen número que están desarrollando procesos productivos circulares como, por ejemplo, embotelladoras que usan el vidrio reciclado como elemento de trabajo, comercializadoras de productos agrícolas ecológicos, recicladoras de residuos o empresas que comienzan a ensayar y producir áridos siderúrgicos procedentes de residuos industriales para su uso en obras civiles, capas de drenaje o carreteras. A aumentar las inversiones y el empleo contribuirán la legislación extremeña que facilita la creación de empresas verdes y circulares como la nueva Ley de Ordenación Territorial y Urbanismo Sostenible (LOTUS), la Ley para una Administración más ágil, o la Ley de contratación socialmente responsable, que promueve la compra verde pública.
EL SOL
Sin lugar a dudas el sector verde que más está creciendo en Extremadura en los últimos meses está siendo el de la generación de energías renovables. Solo en el ámbito de la generación de energía fotovoltaica hay más de 50 proyectos tramitándose que podrían producir más de 5000 MW en los próximos 5 años, y superar los 10.000 en el año 2030, lo que supondría colocar a Extremadura en la primera posición de la generación fotovoltaica de España con el 20% de la producción nacional. A corto plazo, de aquí al 2021, se esperan que estén instaladas unas 21 nuevas plantas con una inversión en la región de más de 3000 millones de euros. Todo ello puede conllevar la creación de cerca de 10.000 puestos de trabajo en los próximos años y un gran desarrollo de sectores industriales ligados a la producción fotovoltaica como, por ejemplo, la producción de estructuras metálicas. Plantas como la de Usagre-Hinojosa, Logrosán o Talayuela se van a convertir en referencia europea.
EL VIENTO Y EL BOSQUE
Por primera vez la región cuenta con un parque de producción eólica, situado en Plasencia, y se están tramitando otros 12 para los próximos años. Otro gran sector a desarrollar y que está dando también sus primeros pasos en la región es el de la producción de biomasa, con un gran potencial tanto de producción como de consumo en Extremadura, con futuras plantas de nueva creación en Sierra de Gata, Hurdes y la Siberia que podrían dar empleo, directo e indirecto, a más de 1500 extremeños en los próximos 25 años. Todo ello, además, ayudando a la prevención de incendios forestales y a la fijación de población en los núcleos rurales.
LA TIERRA
Otro gran sector que está experimentando un aumento muy importante en la región es el de la agricultura y ganadería ecológica. El número de empresas dedicadas a esta producción en Extremadura se ha duplicado, pasando de 108 en el año 2015 a 214 en el 2018. El número de operadores de producción ecológica se ha incrementado de 2984, en el 2016, a más de 3200 en el 2018, mientras que la superficie dedicada a producción ecológica en el 2018 supera ya las 95.000 hectáreas. Todo ello se ha visto reforzado con la aprobación del Plan Estratégico para el fomento de la Producción Ecológica en Extremadura que, con una inversión pública de 41 millones de euros y 20 medidas, pretende seguir multiplicando el número de trabajadores y empresas de este importante sector regional.
EL AGUA
Y si el sol y la tierra son importantes en Extremadura, no lo es menos el agua. Con la tercera parte del agua embalsada de toda España y 1500 km de costa de agua dulce, es uno de los más importantes recursos regionales para la creación de riqueza y empleo. El turismo ligado al agua es un gran sector económico regional. En la actualidad, Extremadura cuenta con dos playas con bandera azul (Orellanas y Cheles), dispone de más de 50 zonas de baño naturales a las que hay que sumar importantes proyectos e inversiones de futuro que comienzan a materializarse. El agua destinada a la agricultura, con un potencial de 10.000 hectómetros cúbicos de almacenamiento de agua para regadío, en la actualidad abastece 265000 hectáreas, superficie que se verá incrementada en 22000 ha cuando estén puestos en marcha los nuevos regadíos en espacios como Monterrubio, Villanueva del Fresno, Tierra de Barros o Don Benito, con 300 millones de inversión, a lo que hay que añadir la apuesta por el regadío de montaña en Jerte, la Vera y Ambroz con 12 millones de euros de inversión. Todo ello va a suponer un amento muy importante en el número de empresas y trabajadores extremeños dedicados a los sectores de regadío regional. El tratamiento del agua también está generando riqueza y empleo ya que, en los próximos 3 años, se construirán 47 nuevas estaciones de agua residuales, con 63 millones de inversión, y se destinarán 22 millones al tratamiento de agua potable, construcción y mantenimiento que crearan cientos de puestos de trabajo.
CONSTRUCCIÓN, RESIDUOS Y MOVILIDAD SOSTENIBLE
Los sectores de la construcción ligados a la economía verde y circular experimentarán en los próximos años un fuerte desarrollo, ligados sobre todo a la eficiencia energética en la edificación, entre los que cabe destacar el plan regional para la eficiencia energética en los más de 700 edificios públicos de la junta de Extremadura, con más de 200 millones de inversión, y las ayudas para la rehabilitación en el ámbito privado.
Igualmente en el sector de los residuos, donde se invertirán más de 225 millones de euros para los próximos 15 años, y ya se está implementando el sistema de recogida puerta a puerta de la fracción orgánica, lo que supondrá la creación de nuevos nichos de empleo. Además, con la estrategia regional para el impulso del coche eléctrico en Extremadura, con una inversión público-privada de 235 millones de euros hasta 2030, se pretende incrementar la flota de vehículos y los puntos de recarga, lo que igualmente se traducirá en nuevos yacimientos de empleo regionales.
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